¿Aprendes entrenando?

Dar bolas es una actividad física, sin más. Entrenar bien requiere versatilidad, concentración, esfuerzo físico, cansancio mental, perseverancia y mucha paciencia.

Por ello, cuando diseñamos entrenamientos en Gamyplan tenemos en cuenta todos estos aspectos:

  1. Entender perfectamente el objetivo de la práctica
    • ¿Cómo puedo conseguir que el alumno entienda el qué y el para qué de lo que quiero que practique? La mejor manera de conseguirlo es que el alumno entienda las «causas – efectos» de lo que vamos a corregir a través de las conversaciones que mantengamos a través de preguntas abiertas.
    • Dedicar unos minutos durante la clase para explicar el entrenamiento que recibirá, ya que facilitará la oportunidad de preguntar, demostrar o explicar de otra forma los objetivos, montaje y tiempos de entrenamiento.
  2. Independencia del alumno para detectar cuando lo está haciendo bien o mal. Para ello es importante que las actividades sean variadas y el entrenamiento esté correctamente diseñado para su nivel de juego (punto óptimo de desafío).
    • Hay tres aspectos claves para que el tiempo que se dedique a la práctica sea efectiva:
      • Obtener feedback: Los ejercicios o juegos deben estar diseñados para que el que lo está practicando pueda llegar a entender qué es lo que ocurre cuando lo hace bien y qué cuando lo hace mal. Veamos un ejemplo;
        • Pensemos en una práctica relacionada con la orientación de la cara del palo en el momento del impacto en el putt. Vamos al putting green con 3 bolas y tiramos un putt de más o menos 1,5 metros. Metemos una bola, fallamos una por la derecha y fallamos otra por la izquierda. Las preguntas que probablemente se haga el jugador son: ¿Qué he hecho bien para meter la bola en el hoyo? ¿Estaba apuntando mal cuando he fallado? ¿He realizado una línea de swing incorrecta cuando he fallado? ¿La cara del palo ha llegado mal orientada en el momento del impacto?
        • Desde Gamyplan para una práctica de la orientación de la cara del putt en el momento del impacto recomendaríamos el uso de una bola con línea pintada en el ecuador de la bola o una bola de dos colores como el modelo de Srixon Q-Start TOUR Divide. La visualización de la línea durante la rodadura de la bola nos proporciona la información exacta sobre si la cara del palo ha llegado cuadrada, abierta o cerrada respecto a la línea de swing.
      • Actividades variadas: En el campo, la única vez que repetimos un mismo golpe es cuando golpeamos la bola fuera de límites. El resto de los golpes TODOS completamente diferentes en cuanto a distancia, posición de pies, colocación de bola o palo utilizado.
      • Actividades adaptadas a cada nivel: ¿Qué hacen los vídeo juegos que enganchan tanto? Una de las principales características es que son capaces de adaptarse a todos los niveles. Si un entrenamiento es muy sencillo o difícil es muy probable que el alumno abandone la práctica. Por esto es fundamental, al crear una actividad, que la persona que está practicando sepa cómo se puede hacer más sencilla o complicada con el fin de que cada jugador encuentre su punto óptimo de desafío.
  3. Tiene que ser en parte o en su totalidad medible. Es muy importante anotar los resultados para así crear una simulación lo más real posible al estado y entorno que tenemos al jugar por el campo. Además, llevar un control de los resultados es la mejor manera de medir el rendimiento.

Por este motivo, prácticamente la mayoría de los ejercicios en Gamyplan tienen la opción de anotar el resultado obteniendo así estadísticas de los días realizados, resultados y medias.

Dar bolas es una cosa y entrenar bien es otra muy diferente que requiere muchos puntos a tener en cuenta y que iremos viendo en próximos artículos del blog.

La mejor forma de estar conectado con nosotros es a través de la newsletter, en donde enviamos los artículos del blog además de otro tipo de contenido muy interesante tanto para coaches como para jugadores que os servirán para optimizar al máximo los entrenamientos y obtener así mejores resultados.

Deseando que tengas un feliz día y ¡Muchos birdies!

¿Crees que es importante la comunicación en las clases de golf?

La industria de la enseñanza del golf está repleta de cursos técnicos, sistemas de enseñanza, tecnología de análisis 3D, monitores de lanzamiento, plataformas de fuerzas, etc.

¿Pero, cuánto se habla de cómo debe ser la comunicación en los momentos previos, durante y posteriores a la clase?

A veces perdemos el rumbo y olvidamos que el eje principal por el que un alumno quiere recibir una clase es porque quiere mejorar su golf. La competencia de otros profesores, las presiones por tener uno u otro sistema nos hacen caer en el error de querer demostrar a nuestros alumnos todo nuestro conocimiento para justificar lo buenos que somos.

Algo tan sencillo como es la COMUNICACIÓN, puede ser una de las herramientas más potentes que nos ayude a conseguir los objetivos marcados para cada alumno.

En Gamyplan consideramos que una clase de golf se podría dividir en tres fases en cuanto a la comunicación:

Pre clase:

¿Consideras importante hablar previamente con el alumno para saber cómo le puedes ayudar en la próxima clase? Y si pudieras acceder a los datos estadísticos de sus entrenamientos y resultados de sus últimas rondas para tener una visión perfecta de cuáles son sus fortalezas y debilidades?. Imagina como se sentirá el alumno si envías un mensaje como este;

«Luis, he estado viendo los últimos resultados en tu perfil de Gamyplan y he visto que con el driver has mejorado mucho. Felicidades! Parece que el esfuerzo que estás realizando empieza a darte resultados. En cuanto a los 3 últimos recorridos, he podido apreciar que tenemos margen de mejora si reducimos el número de 3 putts por green en cada recorrido. ¿Qué te parece si hoy nos centramos en esa parte del juego y te envío posteriormente un entrenamiento específico para que puedas trabajar por tu cuenta? Yo seguiría ese entrenamiento y seguro, podrías quitarte casi 3-4 golpes por vuelta. ¿Nos vemos en el putting green? Muchas gracias, Jesús.»

Revisar entrenamientos y resultados demuestra un verdadero interés por mejorar su juego. Analizar los resultados y tomarte un tiempo para desarrollar el plan de acción demuestra profesionalidad y la comunicación con tu alumno marca la diferencia.

Durante la clase:

Durante los más de 25 años que llevo dando clase he pasado por muchísimas fases y he cometido cientos de errores en cuanto a la comunicación con mis alumnos. Al principio por inseguridad no callaba y sentía que tenía que demostrar al alumno precisamente lo que no sabía, ¿curioso no?. Más tarde me volví un friki (ya me lo digo yo) de la tecnología y todo eran análisis tediosos, datos y exceso de información. Con el tiempo he aprendido a estar más relajado, crear una ambiente agradable y esforzarme por hacer buenas preguntas para guiar al alumno y que él mismo encuentre las respuestas. Mis clases de ahora no tienen nada que ver con las clases que impartía hace 10 años o cuando empecé.

Con los años he aprendido que debe haber un equilibrio entre el conocimiento que te permita ayudar al alumno y la conexión y clima que se debe crear para que eso ocurra. De nada sirve tener mucho conocimiento si no eres capaz de comunicar bien no es sencillo y además en algunos países no nos preparan o forman para ello. Hablar demasiado o hablar demasiado poco, a destiempo, no colocarte en el lugar adecuado, no mirar a los ojos del alumno o tener un lenguaje no verbal pobre, son algunos de los errores más comunes que solemos cometer los profesores durante una clase de golf.

Post clase:

Si algo he aprendido con el paso de los años es que la clase no debe terminar después de la hora que pasamos junto al alumno.

En cualquier reunión de empresa se presentan objetivos, se plantean opciones a seguir y se marcan las hojas de ruta que cada departamento debería realizar. Para mí, una clase de golf es lo mismo. Mantengo una «reunión» con mi alumno con el fin de plantear donde estamos y a dónde queremos llegar. Lógicamente, cuando terminemos la «reunión» él necesitará un plan (entrenamientos) y yo como «coach» debo hacer un seguimiento de sus resultados con el fin de motivarle, alentarle o pivotar si es necesario.

¿Tendría sentido que se hiciera una reunión en la que se hablase de temas interesantes y relevantes para el funcionamiento de una empresa pero nadie hiciera un resumen y no se planteasen soluciones ni objetivos claros?

Que el alumno reciba instrucciones claras y sencillas y unos entrenamientos acordes a los objetivos planteados, es vital para obtener buenos resultados. Motivarlo, hacer un seguimiento y mostrar que estás ahí para ayudarlo es fundamental para que ambos trabajéis como un equipo y conseguir los objetivos.

En Gamyplan ponemos a disposición de los profesores todas las herramientas necesarias para que la comunicación, el seguimiento y el establecimiento de objetivos sea sencillo y eficiente.

Espero que este post te despierte interés sobre cómo realizas la comunicación con tus alumnos en las clases. Deseándote que tengas un feliz día y ¡muchos birdies!